11 septiembre 2006

¿Dimito o no dimito?

Lamentable se puede considerar el espectáculo que ha dado el seleccionador nacional Luis Aragonés con sus declaraciones públicas afirmando que presentaba su dimisión y horas más tarde que continuaba como seleccionador porque al parecer desde la Federación Española le habían convencido por que "su dimisión los dejaba cojos".
Se trata de una tomadura de pelo hacía los aficionados porque yo creo que en ningún momento tenía intención de marcharse, pero había que desviar la atención del mal juego que la selección española viene llevando a cabo.
Desde mi modesta opinión como aficionado al fútbol, lo mejor que nos podía ocurrir es que Luis Aragonés fuera destituido de inmediato porque de no ser así la clasificación para la próxima Eurocopa se me antoja muy difícil de lograr. Esperemos que Villar recapacite y acepté la dimisión del seleccionador, si es que alguna vez se la llegó a presentar.